Ya hemos empezado la operación biquini, por esa razón hoy os traemos una tarta de queso light. Quien me conoce sabe que mis tartas favoritas son la tarta de queso y la de manzana. Esta receta es light y ayuda a sobrellevar un poco mejor la dieta.
Esta tarta de queso light es tan sencilla de hacer, que no te vas a poder resistir a hacerla o probarla. Y es una manera de comer cosas diferentes en una dieta y que te alegren un poco la vida. Por que al fin y al cabo es de lo que se trata…¡¡¡alegrarnos la vida!!!
Ingredientes para tarta de queso light:
- 100 gr de queso para untar 0.0% materia grasa (tipo San Millán)
- 1 yogur natural o de limón desnatado 0.0% materia grasa
- 4 quesitos en porciones light (Santé 3 % MG o El Caserio light…)
- 125 ml de leche desnatada
- 2 cucharadas soperas de harina de maiz (tipo Maizena)
- 2 huevos ( o 2 claras , o 1 huevo y una clara)
- 1 o 2 cucharadas soperas de edulcorante líquido apto para cocinar (Huxol)
- 1 sobre de gasificante
Modo de hacer la tarta de queso light:
- Precalentar el horna a 180ºC, con calor arriba y abajo.
- Poner todos los ingredientes en un recipiente y mezclarlos de manera que queden todos bien integrados.
- Verter la mezcla en un molde de silicona de plum cake.
- Hornear a media altura durante 45 minutos.
- Para comprobar que la tarta de queso light está hecha pinchar con un palillo, si sale limpio la tarta está lista.
Trucos para la tarta de queso light:
Es importante que a la hora de utilizar un edulcorante busques uno que sea apto para cocinar, de lo contrario podría amargar la tarta de queso light. Yo personalmente utilizo un edulcorante líquido que se llama Huxol, y lo compro en El Corte Inglés, porque no es fácil de encontrar en los supermercados.
En cuanto a los ingredientes, cuanto más cercano a 0% MG los utilices mejor. Aunque yo tampoco me machaco mucho y los compro light. Porque no siempre se encuentran en los supermercados a los que acostumbro a ir.
Os recomiendo que si tenéis que presentar la tarta de queso light, uséis un molde de silicona porque no se desmolda demasiado bien. Yo acostumbro a utilizar uno de pyrex o de los desechables, si lo tengo que transportar a algún sitio. Incluso, a veces, utilizo moldes individuales desechables y así, por ejemplo, me llevo la merienda al trabajo.
¡Ojo! Acuérdate de no abrir el horno para ver si ya está cuajado hasta después de 30 minutos de cocción, de lo contrario, no te subirá el pastel.
Si ves que se empieza a dorar demasiado tápalo con un poco de papel de plata.
Creo que no se me olvida nada. ¡Pruébala y ya me dirás si te alegra la dieta!
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